Hada
Take the Fair Face of Woman, and Gently Suspending, With Butterflies,
Flowers, and Jewels Attending, Thus Your Fairy is Made of Most
Beautiful Things por
Sophie Anderson (
1823-
1903).
Un
hada (del
latín fatum:
hado, destino) es una criatura fantástica y etérea, personificada
generalmente en forma de mujer hermosa, que según la tradición son
protectoras de la naturaleza, producto de la imaginación, la tradición o
las creencias y perteneciente a ese fabuloso mundo de los
elfos,
gnomos,
duendes,
sirenas y
gigantes que da color a las
leyendas y
mitologías
de todos los pueblos antiguos. Se puede provocar el contacto con ellas
desarrollando la visión etérea según las leyendas. La mayoría de ellas
se representan con alas. Se conoce de un caso en el que Sir Arthur Conan
Doyle, creador de Sherlock Holmes, fue engañado por unas niñas que se
fotografiaron con figuras de papel en forma de hadas, a las que el
consagrado escritor atribuyó autenticidad.
Características
Las leyendas celtas hablan del reino de los Áes Sídhe (pronunciado Os
Shi) también conocido en idioma inglés como Fairy Folk, y donde la
mejor traducción a nuestro idioma sería Hadas, si bien es importante
recalcar que no se habla de la concepción victoriana de la Hadas, esos
seres diminutos con alas de mariposa, las cuales son en realidad
pixies.
Los Áes Sídhe, son seres semidivinos que viven entre este y el otro
mundo, con conexiones importantes con la naturaleza y las deidades, la
mayoría de los relatos los representan como gente no muy alta, pero de
aspecto y altura humana, de tez blanca, ojos claros y pelo muy negro.
En los relatos
medievales, las hadas (a veces llamadas «El Buen Pueblo» o «La Buena Gente») aparecen relacionadas con
encantamientos y
hechizos,
conocedoras del poder y las virtudes de las palabras, las leyendas y
las hierbas, que les permitían mantenerse jóvenes y bellas, y acumular
grandes riquezas.
En algunos libros, se menciona que las hadas hacen todas las cosas
inocentemente, aunque su comportamiento pueda llegar a ser perverso. En
muchos escudos heráldicos de esta época se refleja el mundo de las
hadas. Muchos aristócratas querían hacer ver que provenían de un linaje
de las hadas.
En la
mitología cántabra se las llama
anjanas, entre las que están las
Ijanas del Valle de Aras,
cuya característica es que tienen pechos descomunales y son feas, pero
pueden cambiar de apariencia a voluntad. Este mismo tipo de hadas se
encuentra en la
isla de Gotland, en
Suecia. En
Galicia se llaman
fadas, en
Asturias reciben el nombre de
xanas, en
Cataluña además de
fada, se le llaman
goljas y en
Baleares Damas de aiguo.
La
mitología nórdica y la
griega -encarnada en las
ninfas y
dríades de
Homero y
Ovidio- influyeron en el concepto que los primeros
bardos se formaron de las hadas, pero andando el tiempo los
escoceses,
irlandeses,
galeses y otros pueblos
europeos llegaron a poseer un cuerpo lleno vivo de tradiciones, fundado principalmente en las leyendas
celtas.
Inicialmente se atribuyeron a las hadas proporciones humanas, pero las diminutas y etéreas criaturas de
Shakespeare influyeron poderosamente en las concepciones posteriores de los poetas ingleses.
Varios rasgos comunes caracterizan a estos habitantes del ultramundo
en todos los países: se clasifican en benéficas y perversas, precisan
ocasionalmente de apoyo humano, sus órdenes deben cumplirse
estrictamente so pena de terribles castigos, etc.
Algunas de ellas son hadas convertidas en tales pero que antes habían
sido mujeres humanas. Estas se convirtieron en hadas a causa de alguna
infracción contra la naturaleza (ya que es el sitio en donde viven),
siendo castigadas por ello a tener tal apariencia, incluso a vivir en el
mundo de las hadas. Pueden ser desencantadas de diversas maneras en
fechas concretas del año, como en
La noche de San Juan
y por ejemplo cuando se asoman a las aguas cristalinas y piden ser
desencantadas. Para las que se convertían en hadas o cruzaban el límite
existente entre el mundo humano y el de las hadas, el tiempo en el
espacio cambiaba ya que un día o un mes podía ser un año o un siglo.